Paco Casero ha puesto fin a su
huelga de hambre este mediodía en el Museo de la Almendra Francisco Morales de
Zamoranos (Priego de Córdoba), sin descartar volver a tomar esta medida “si
continúan la falta de sentido común, las desigualdades y la excesiva burocracia
que entorpece los proyectos y la vida de los ciudadanos”. Paco Casero ha pasado
el testigo de su reivindicación a las 400 personas que procedentes de toda
Andalucía y Castilla la Mancha, especialmente de núcleos rurales, le han
mostrado su identificación con “un cambio de mentalidad y de actitud, porque
nosotros no vamos separando, vamos uniendo a la gente, por lo que espero que
esta semilla germine en todos”, ha declarado, añadiendo que el “zamarreo” que
ha provocado esta huelga en diversos ámbitos le hace albergar esperanzas en que
produzca un cambio para “un mejor futuro de nuestros nietos, que es por los que
he hecho esto”. Gran cantidad de testimonios han arropado a Paco Casero en este
día.
Paco Casero ha concluido su
huelga de hambre este mediodía en acto celebrado en Zamoranos (Priego de Córdoba)
por la Dignificación y Compromiso de los Hombres y Mujeres del Campo y la
Ciudadanía en general, en el que se han dado cita unas 400 personas de toda
Andalucía y diversas zonas de Castilla La Mancha.
Emotivos testimonios, y sobre
todo, muy identificados con las reivindicaciones que Paco Casero ha llevado a
cabo, han tomado la palabra en este encuentro en el que ha coordinado el turno
de intervenciones Ezequiel Vallet, presentador del espacio Tierra y Mar de
Canal Sur Televisión, y han tomado la palabra además de ganaderos y
agricultores de a pie de a lo largo y ancho de nuestra comunidad autónoma,
varios empresarios del sector ecológico y profesores y representantes del mundo
de la Universidad, entre ellos el rector de la Universidad de Jaén, Manuel Parras,
y el director de la Cátedra de Ganadería Extensiva de la Universidad de
Córdoba, única en Europa, Clemente Mata.
Aparte de todo ello, Paco Casero,
ovacionado por el público presente y muy reflexivo durante los turnos de
intervención, tomó la palabra para manifestar que “como he hecho a lo largo de
estos días en diversos sitios que he estado, tengo que empezar pidiendo perdón,
y esta vez lo hago a todas aquellas personas que han hecho posible con su
esfuerzo esta huelga de hambre, principalmente todos los enclaves de los
pequeños pueblos en los que se ha alojado desde que comenzó en solidaridad con
la discriminación de los municipios rurales su huelga de hambre en Venta del
Rayo, pedanía de Loja.
“No había otra forma de hacerlo”,
ha declarado Casero, que ha confesado que la huelga de hambre se la venía
planteando “desde hacía muchísimo tiempo”, ya que “pertenezco a una generación
que luchó duramente contra la Dictadura y sufrió mucha represión, luchamos por
una tierra que en democracia tuvo perspectivas de bienestar y felicidad, pero
viendo la situación en la que estamos me pregunté y me sigo preguntado, ¿puedo
mirar para otro lado?”.
Durante este tiempo, Paco Casero
ha participado en presencia en 49 actividades y ha realizado más de 46.000
kilómetros por las ocho provincias andaluzas, Ciudad Real y Albacete y aparte
de las reivindicaciones ya conocidas de reducir burocracia, agilizar las
administraciones y la justicia o denunciar la falta de oportunidades para los
jóvenes capacitados que salen de las Universidades, otro de los grandes ejes de
su huelga ha sido la dignificación de los hombres y mujeres del campo.
Por ello, ha expuesto que en
Francia son personas muy respetadas y en Alemania mantienen en las grandes
ciudades sus mercados agrícolas y ganaderos, habiendo una “estrecha relación de
reconocimiento entre consumidores y el sector”, por lo cual “¿por qué no existe
aquí que somos la principal potencia agrícola y ganadera de Europa?” ha
afirmado.
Decepcionado por la Política
Agraria Común Europea y la obsesión de España y Andalucía por mantener las
ayudas sin explorar la comercialización, y criticando nuevamente el olvido al
que en dichas políticas ha sido sometido el sector de la producción ecológica,
“que está demostrado que crea un 30 por ciento más de empleo y genera valor
añadido, biodiversidad y combate el cambio climático”, ha exclamado emocionado
que “no hablemos de ayudas, nunca se pagará lo que los hombres y mujeres del
campo hacen por esta tierra, ¿por qué no hay un compromiso con la agricultura y
ganadería ecológica?”.
Asimismo, ha lamentado
profundamente que “los pueblos de Andalucía interior han perdido todos
población entre 2008 y 2013, lo cual sólo provoca crear más suburbios y
miserias en las ciudades, ¿hay alguien que tenga una visión más allá, que diga
qué objetivos tenemos para los próximos 10 o 20 años en Andalucía aparte de
decir la tontería de que somos la California de Europa?”.
Paco Casero ha explicado que ha
tomado y que “volvería a tomar la misma medida” de huelga de hambre porque “se
ha creado una sociedad sin decisiones colectivas, sin participación donde no se
genera ilusión ni motivación”, reflexionando que “en los años 70 y 80 tuvimos
una clase política fuerte porque la sociedad civil era fuerte y si ahora la
sociedad es mediocre, también lo es la clase política, como me decía el Rector
de la Universidad de Jaén, para todo el mundo lo suyo es lo más importante,
¿quién piensa en la colectividad?”.
“Estamos en un país obsesionado
con construir autovías y al final son inversiones que no van a parar al
progreso en el conocimiento y la innovación, se deben mirar las cosas de otra
forma”, ha asegurado.
Durante estas más de tres semanas
en huelga de hambre Paco Casero ha declarado ver “a ganaderos llorando de
impotencia porque pierden más tiempos en los papeles que en su propia
actividad, no puede ser que haya 46 normas para la ganadería extensiva y 163
normas de urbanismo, es necesario poner sentido común”, ha declarado también
aludiendo a retraso de años para citaciones judiciales de reclamaciones
salariales o de empresas ante la Seguridad Social, lo cual califica de
“indecente”.
Por todo ello, “Hoy es un día de
un Encuentro por la Honestidad, por el Compromiso, contra la Corrupción, para
la cual tenemos que hablar de transparencia, sin transparencia nunca terminará
de haberla”.
Finalmente Casero ha reclamado
que las administraciones “sirvan a los empresarios y a las empresas, que son
los que podrán dar respuesta a la situación de paro tan grave que vivimos, y
sólo así se podrá atender los servicios sociales, sanidad y educación”, además
de insistir en su reivindicación de que “es necesario unir la Universidad y la
empresa y que entre todos tengamos proyectos comunes”.
Casero ha expresado su esperanza
de que se consigan llevar a cabo algunas de sus propuestas, especialmente en el
ámbito de la agricultura y ganadería ecológica, para lo cual ha anunciado que
tiene concertado un calendario de reuniones.
La primera de ellas el 12 de
marzo con la Consejería de Agricultura para crear Mesas de Trabajo específicas,
y la segunda el 17 con la de Medio Ambiente, además de haber logrado que “tras
dos años que llevábamos pidiéndolo, el Ministerio de Agricultura se comprometa
a elaborar el Plan Estratégico para la Agricultura y Ganadería Ecológica”.
“De una vez por todas tenemos que
buscar la unidad entre todos los ámbitos y sectores”, ha afirmado, lamentando
que la clase política entre la que “admiro a algunas personas con vocación de
servicio”, a la hora de debatir en el Parlamento o el Congreso “lleven todo por
escrito pendientes de responder a lo que le va a decir al otro”, situación que
considera “una falta de respeto ante los graves problemas que existen hoy en
día en la sociedad” y ante la que llama a “reaccionar y hacer frente”.
“Si cuando nos vayamos de
Zamoranos, cada uno de nosotros nos preguntamos si ha cambiado algo en nosotros
mismos, habrá merecido la pena” la huelga de hambre, concluyó, asegurando que
“no voy a desviarme ni un minuto, hoy se puede terminar una parte de la acción
que he tomado, pero si veo que dentro de un tiempo estamos igual o peor, lo
volveré a hacer, si vemos que dentro de un
tiempo estamos igual o peor no podré mirar a mis nietos, que son los
nietos de España y de Andalucía y que tiene que ser a lo que cada uno de nosotros
aspiremos, a que este esfuerzo remueva las conciencias y se puedan sentir
orgullosos de nosotros cuando pasen los años y decir gracias a sus mayores”.
“Me gustaría que este entusiasmo
y conciencia que veo hoy en los hombres del campo se transmita a toda la
sociedad, gracias por estar aquí, nosotros no vamos separando a la gente, vamos
uniéndola, esta etapa ha dado un paso, pero tocará a su fin verdaderamente
cuando esta semilla haya germinado en todos”, concluyó Casero.
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